«El rey recibe«, de Eduardo Mendoza es una novela que no lo es tal, sino una relación de hechos a nivel mundial que influyeron en los cambios acaecidos en la sociedad de los años 60/70.

Escritor excelente y con una trayectoria tan amplia como brillante, Eduardo Mendoza nos tiene acostumbrados a una prosa ágil, fluida, desenvuelta e inteligente, con un humor sarcástico y una ironía mordaz, que se burla de todo aquello que para él es mera falacia.

A lo largo de su obra no ha mostrado el menor recato en dejarnos claras sus opiniones y su posicionamiento más sincero. Desde «El misterio de la cripta embrujada”, pasando por “El secreto de la modelo extraviada” y “La aventura del tocador de señoras” hasta su magistral “Riña de gatos”, Mendoza ha demostrado que es uno de los grandes escritores de los últimos 40 años. Incluso genial es ese experimento que es «Gurb» y que en otras manos no habría pasado de ser una obra banal, extravagante y llena de sinsentidos. 

Sorprende Eduardo Mendoza con «El rey recibe». A través de la vida ajetreada de Rufo Batalla nos va desgranando con cierto humor esos cambios sobrevenidos en España a partir de nuestra guerra y en el mundo a continuación de la segunda mundial. Esa narración tiene como base a un protagonista y se sirve de él para su desarrollo.

Nada de lo que le sucede a Rufo tiene importancia. Mediante él va uniendo, en tono quejumbroso y algo pesimista, aquellos hechos que cambiaron la sociedad de la época y que la fueron preparando para la actual, desde la educación opresiva hasta la sumisión y el conformismo, la triste postguerra española, la guerra fría, la guerra de Vietnan, el feminismo, la incorporación de la mujer al mundo laboral, el desplazamiento de la cultura y su deriva que proponen las nuevas formas actuales de expresión, el movimiento gay y la igualdad racial.

Cambios importantes y que marcaron un tiempo que no fue ni peor ni mejor que otro. Mendoza pasa de puntillas por todos ellos, sin hacer demasiado ruido. No están en las quejas las soluciones. Es un análisis triste de una época, en la que parece que todo fue muy negro y del que el autor saca una clara conclusión, que no es otra que la necesidad de transparencia e información veraz. 

Sin embargo, “El rey recibe” adolece en alguna de sus partes de la falta de ingenio, lo que provoca altibajos en el interés general. Echamos en falta el característico sentido del humor del catalán, esa chispa que tantas veces nos ha subyugado y que aquí apenas encontramos en contadas ocasiones. 

Quizás la justificación la encontramos en que el fin de Mendoza es el de efectuar una denuncia callada, entre líneas y subliminal de esas personas que van y vienen a sus anchas y aparecen aquí y allá, sin necesidades aparentes, gozando de un trato y de un reconocimiento y una situación económica que no tiene ninguna explicación. 

Sin duda una novela imprescindible para seguidores de Mendoza. 

«El rey recibe»

Autor: Eduardo Mendoza

Fecha de la primera publicación: 4 de septiembre de 2018

Por Mr. Tom

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